viernes, 26 de abril de 2024

Una historia de violencia y de convivencia

El cómic Historia de Jerusalén, erudito, crudo y divertido a la vez, resulta muy útil en unos tiempos en los que el pasado se utiliza como arma arrojadiza

Por Guillermo Altares

Página del comic de Historia de Jerusalén (Garbuix Books). V. Lemire/ C. Gaultier

Jerusalén, parafraseando lo que dijo Winston Churchill de los Balcanes, ha producido más historia de la que puede digerir. Desde los tiempo de Abraham, la ciudad se ha visto engullida por masacres religiosas a lo largo de los siglos. La maldición de la violencia y la muerte es una de las conclusiones que se puede sacar de la lectura del cómic Historia de Jerusalén, una obra concienzuda, y a la vez divertida (a ratos) e instructiva (en todo momento), sobre la ciudad santa para las tres grandes religiones del Libro. Cuando la visitó, Herman Melville se llevó una impresión deplorable y escribió: "La ciudad está asediada por el ejército de los muertos: hay cementerios por todas partes. Allí donde se mire, solo veo cuevas y caminos de piedra, muros de piedra... Corazones de piedra". Es, sin duda, una ciudad de fe, pero también de muerte.

La otra conclusión a la que lleva el libro es que, pese a todo, la convivencia es posible. Jerusalén no puede dejar de ser lo que es, la ciudad tres veces santa y el epicentro del conflicto israelo-palestino, pero no significa que esté condenada por su pasado, ni por los momentos de violencia e intolerancia. El capítulo séptimo del tebeo se titula "la paz otomana" (1516-1799) y describe uno de los periodos más prósperos y ricos de la ciudad santa. Relata, por ejemplo, la historia del investigador israelí Ammon Cohen, que se dedicó a estudiar los oficios que proliferaron durante aquella época de relativa tranquilidad: tallistas de piedra, pregoneros, ceramistas, peluqueros, cirujanos, vendedores de agua, a través de los que se puede trazar un relato de cómo funcionaba la urbe. Uno de los más interesantes es el de carnicero, porque descubrió que los judíos podían vender carne a los musulmanes como si fuese halal y los musulmanes a los judíos como si fuese kosher porque el método de sacrificio del animal era igual, una demostración de la fluidez del trato entre las comunidades.

Mezclando la erudición de Simon Sebag Montefiore en Jerusalén. La biografía y la gracia de Guy Deslisle en Crónicas de Jerusalén, el cómic resulta especialmente útil en estos tiempos, en los que la historia y el pasado es utilizan como arma arrojadiza en Oriente Próximo. El guión es obra del historiador Vicent Lemire, que fue director del Centro Francés de Investigación de Jerusalén, y los dibujos,  de Christophe Gaultier -una línea clara, teñida muchas veces de humor, con enorme trabajo en el reflejo de la arquitectura y en la ambientación histórica-. Narrado a través de un árbol milenario que contempla la ciudad desde el monte de los Olivos, solo hay un misterio que deja sin resolver: ¿Por qué esta ciudad de inviernos heladores y veranos insoportables, en mitad de la nada, rodeada de desierto, es uno de los centros espirituales del mundo?

La historia demuestra que ninguna de las tres religiones del Libro puede reivindicar Jerusalén por encima de las demás porque fieles de las tres han sufrido y muerto en ella, pero también porque han existido momentos de tolerancia. A veces los problemas complejos tienen soluciones sencillas. En el caso de Jerusalén, bastaría con recordar aquellos momentos de su pasado en los que la convivencia fue posible porque es la única solución para un territorio sagrado al que nadie va a renunciar.


Historia de Jerusalén

Vincent Lemire y Christophe Gaultier

Traducción de Paul Gross Calcina

Garbuix Books, 2024

235 páginas. 29,95 euros


El País. Babelia núm. 1.691. Sábado 20 de abril de 2024



jueves, 25 de abril de 2024

The Art of Deathloop (IV)

 

























Poderes irresponsables

¡Regresa uno de los grupos de superhéroes más extraños del cómic!


JOSÉ LUIS VIDAL

23 Abril, 2024

¿Os habéis preguntado alguna vez que pasaría si, de pronto, tuvierais poderes sobrehumanos?

Probablemente, un porcentaje de vosotros, seguro que pequeño, os dedicaríais a salvar y proteger a todos los desvalidos. Pero me juego lo que queráis a que, con esas nuevas facultades adquiridas, el lado oscuro que todos y todas tenemos afloraría, dejando ver esa cara malvada, al del villano ambicioso que quiere poseer lo que le es ajeno…


La Imparable Patrulla Condenada

Guion: Dennis Culver

Dibujo: Chris Burnham

Tapa blanda

Color

176 págs.

20,50 euros

ECC Ediciones

Pues bien, volviendo a las viñetas, tras el suceso que golpeó al Universo DC llamado Planeta Lázaro, los metahumanos campan por doquier las calles del planeta, convirtiéndose la mayoría en una amenaza para la seguridad mundial.

Si además a este hecho le sumamos que siempre va a asomar la cabeza una empresa científico-tecnológica que busque aprovecharse de estas circunstancias, pues ya tenemos montado un perfecto escenario para que este peculiar grupo de inadaptados, que una vez reunió el taimado doctor Niles Caulder, vuelva al campo de batalla, a la acción más pura y dura.

Ellos son, por si aún o lo sabéis, la Patrulla Condenada, y en esta ocasión siguen habiendo caras conocidas entre sus miembros como Robotman, Cliff Steele, un ex piloto de carreras, malhablado y que vive torturado dentro de un armazón metálico; el Hombre Negativo, Larry Trainor, que surcó los cielos hasta que un terrible accidente le transformó, llevando en su interior a un ser alienígena; Elasti-Woman, Rita Farr, como su nombre indica, tiene la facultad de estirar su cuerpo a voluntad… Y, como nuevas incorporaciones, La Jefa, que es, ni más ni menos, que otra de las múltiples personalidades del personaje al que siempre hemos conocido como Crazy Jane. Y para completar este curioso grupo, la pequeña Beast-Girl que, aunque es corta en estatura, posee unas facultades que van a sacar a sus compañeros de más de un apuro.

Pues bien, como ya os comentaba, los principales enemigos de los protagonistas en esta ocasión son los empleados de Metagen INC., así como los peligrosos metahumanos que han salido de sus laboratorios. Uno de ellos, Degenerado, los lleva a una ciudad que todos conocemos muy bien, Gotham, y allí, obviamente, el que parte el bacalao es cierto vigilante oscuro con el que tendrán que cruzar algo más que palabras si quieren convencerlo de su propósito.

Pero este no es el único peligro que se va a cernir sobre el grupo, ya que viejos enemigos de éste, como Cerebro, Mallah e Inmortus, son los tres vértices del regreso de uno de los más letales villanos a los que La Patrulla Condenada ha tenido que enfrenarse…

Pero esto no es todo, amigos. Además, vamos a viajar a la flamante nueva base del grupo, donde nos encontraremos con viejos conocidos, como Flex Mentallo, o algunos nuevos, como la psicóloga Syncho.

Los peligros acecharán a la vuelta de la página, como un par de rudos Green Lanterns, o una visita al pueblo de New Polar, donde tendrán que vérselas con Metawoman…

Pero esto es solo el principio de unas peripecias surgidas de la imaginación del guionista Dennis Culver (Burnouts, Crone, Romeo Muerte…), que vuelve a reunirse con el dibujante Chris Burnham (Batman Incorporated, Nameless, ¡Die!¡Die¡Die!...), del que es un viejo conocido, además de David Lafuente (Runaways, Ultimate Spiderman, Radian Black…), que se encarga de ilustrar un episodio muy especial dentro de este volumen que hará las delicias de los seguidores de este bizarro grupo.


Malaga Hoy


martes, 23 de abril de 2024

‘Sugar’ escribe una carta de amor al ‘noir’, Hollywood y Los Ángeles

Colin Farrell protagoniza una serie que homenajea a clásicos del cine negro tanto en su temática como en su estética

Colin Farrell, en un momento del segundo episodio de 'Sugar'.

NATALIA MARCOS

Madrid - 06 ABR 2024 

Cuando el espectador conoce a John Sugar, lo hace en blanco y negro. Está en Tokio y busca al hijo de un jefe de la yakuza, la peligrosa mafia japonesa. Poco después, con ese caso ya resuelto, en color y acompañado por la voz en off del propio protagonista, John Sugar aceptará un nuevo caso. Discretísimo, muy eficaz y especializado en la búsqueda de personas desaparecidas, ahora le contrata un legendario productor de Hollywood para buscar a su nieta.

Sugar (estreno el 5 de abril en Apple TV+ con sus dos primeros episodios) es, sin disimulo, una carta de amor al clásico género literario y cinematográfico de los detectives privados. Lo es en su personaje, la clase de hombre solitario, atormentado, misterioso y de pocas palabras que podrían haber interpretado Humphrey Bogart o Robert Mitchum y al que aquí da vida Colin Farrell. Lo es en su estética y en los movimientos y ángulos de la cámara, inspirados en el cine de los años cuarenta y cincuenta. Y lo hacen explícito los clips de clásicos como Retorno al pasado (1947), Historia de un detective (1944), El sueño eterno (1946), El halcón maltés (1941), El beso mortal (1955) o Los sobornados (1953) que interrumpen el discurrir de los capítulos.

Y por encima de todos, está Chinatown (1974), la película que Simon Kinberg, uno de los productores ejecutivos de Sugar, menciona como referente claro de la serie creada por Mark Protosevich y dirigida por el brasileño Fernando Meirelles. “Aunque el ADN y la genética del noir está en mucho de lo que vemos hoy en día y en las series de detectives que hay en la televisión, y dios sabe que hay cientos, y en muchas películas sobre crímenes, quería hacer algo que fuera una carta de amor a aquellas películas originales”, cuenta el productor en una entrevista por videollamada. “Ahora, o hay historias de detectives y policías, donde lo importante es el argumento, o giran a algo más interesante, para mí, que son los personajes y la emoción. La combinación de las dos cosas es rara de encontrar hoy. Como alguien que lleva mucho en esto, creo que ahora no tienes esa combinación de una historia con profundidad y un gran trabajo de personaje al mismo tiempo”, añade.


Kirby y Colin Farrell, en la serie 'Sugar'.

Sugar, además de homenajearlo, actualiza el género negro y el estereotipo del detective privado. “En las películas noir clásicas, el detective tiende a ser alguien confiable, capaz y no particularmente misterioso, un poco unidimensional. El personaje de Sugar es, en muchos sentidos, el mayor misterio de la serie. Es complejo, vulnerable y humano”, explica Kinberg. A ello ayudaron las aportaciones de Colin Farrell. El actor irlandés, también productor ejecutivo de esta ficción, ayudó a construir el personaje y a dar personalidad a la producción entera, según explica Kinberg. “Él ha aportado al personaje la fortaleza y el carisma de una estrella de cine, y al mismo tiempo, sientes que es un hombre herido, roto y vulnerable, inocente”, añade el productor, que también destaca la fortaleza de los personajes femeninos como otro elemento en el que la serie se diferencia del noir más clásico, donde las mujeres tendían a ser “o débiles o malvadas”. Además, la trama de la serie, situada en el presente, aborda temas como la adicción, la misoginia, la identidad sexual y racial, el acoso sexual y la trata de personas.


Más destinatarios

La carta de amor que escribe Sugar, con ocho capítulos que, a excepción del primero, apenas superan la media hora, tiene más destinatarios. Otro de ellos es el cine en general. Muchas de las localizaciones encierran referencias al Hollywood clásico. Por ejemplo, la gran mansión en la que vive el veterano productor que contrata a Sugar, Jonathan Siegel (interpretado por James Cromwell) fue residencia del productor de James Bond Albert Broccoli. El bar en el que Sugar conoce a Melanie, la madrastra de la chica que busca (interpretada por Amy Ryan), es en realidad el legendario Boardner’s, un pub que abrió las puertas en 1927 y que, entre otras muchas, ha aparecido en L.A. Confidential (1997).


Amy Ryan y colin Farrell, en la barra del Boardner's en el primer episodio de 'Sugar'.

El tercer destinatario de esta misiva es, precisamente, la ciudad de Los Ángeles. Al igual que títulos como Un largo adiós, Chinatown, Heat o, claro, L.A. Confidential, Sugar también explora una urbe que, en palabras de Simon Kinberg, es “un lugar fascinante, complejo y caótico”. “Vivo aquí y es un sitio de increíble oscuridad, increíble luz, bondad, maldad, corrupción, amabilidad… Por eso creo que Chinatown era una gran referencia para nosotros, porque muestra los puntos más altos de Los Ángeles y Hollywood, eso con lo que todo el mundo fantasea, y luego también la realidad de esa fantasía, que puede ser muy oscura, muy cruel, muy violenta y peligrosa”, reflexiona.

Grabar en Los Ángeles también fue, al mismo tiempo, el mayor reto para la producción. “Es muy poco común rodar en Los Ángeles, a pesar de que la gente de la industria vive aquí. Llevo en este negocio unos 25 años y solo he hecho otra cosa antes aquí, y fue mi primera película, Sr. y Sra. Smith. Es muy difícil cortar una calle en una ciudad donde todo el mundo conduce. Trabajar en localizaciones aquí es más difícil de lo que debería”.

Para Kinberg, también creador de la serie de Apple TV+ Invasión, las historias de detectives permiten dar orden y tener tranquilidad en el caos actual. “Nuestro mundo da miedo y es un caos, es complicado, y la verdad es difícil de encontrar porque las redes sociales y los nuevos medios e incluso nuestros líderes nos mienten. La idea del detective como faro de la verdad, alguien que puede encontrar la verdad, es un mundo donde todo es tan confuso, es reconfortante, y quizá ahora más que nunca porque el mundo es más caótico que nunca”.


El Pais, sábado 6 de abril de 2024


lunes, 22 de abril de 2024

Biografía de una leyenda

Carlos García Gual compila en un volumen dos textos emblemáticos de la tradición popular en torno a las gestas de Alejandro Magno


Medallón de Alejandro Magno, de en torno a 1500. Heritage images/Getty


Por David Hernández de la Fuente

En el kilómetro cero de la literatura se encuentra la narrativa patrimonial más pura, de raigambre popular, que se concreta en la Antigüedad tardía en algunas preciosas reliquias de novelas pioneras. El último de los géneros que inventaron los griegos, a partir de ciertos mimbres posclásicos -las aventuras de amantes peregrinos, los viajes a países fantásticos y las vidas legendarias de personajes extraordinarios- entrelazados  en la forma de un relato marco y sus pequeñas narraciones enmarcadas, tiene en la fabulosas Vida de Alejandro uno de sus ejemplos más singulares. Nacía así este "género sin nombre" que va desde la novela griega al romance medieval y, de ahí, hasta la modernidad en una larga peripecia de la que es gran conocedor el editor de este volumen, Carlos García Gual.

Más allá de la historia, el monarca macedonio, famoso por su fugaz gesta en la historia del helenismo, protagonizó aventuras sin par en las que, para explorar lo desconocido, descendía a las profundidades del océano o se elevaba por la bóveda celeste llevado por animales fantásticos. Otras veces conversaba con los ascéticos brahmanes o con árboles y aves parlantes, y conocía a seres monstruosos a los que luego había de confinar tras un muro más allá del mundo civilizado. La compilación que nos presenta García Gual en este estupendo volumen se compone de dos ejemplos emblemáticos de la tradición popular sobre Alejandro: por un lado, está el propio origen de esta tradición, la llamada "Novela de Alejandro" atribuida falsariamente a Calístenes, historiador de la época del rey macedonio. Esta novela griega del Pseudo-Calístenes, con sus varias recensiones antiguas, entre los siglos III a V, es la fuente de las traducciones posteriores (especialmente influyentes las versiones intermedias latinas, armenias y siriacas a muy diversas lenguas en Oriente y Occidente, desde el francés al persa. Aquí se nos presenta a un Alejandro muy diferente del histórico, hijo del mágico faraón Nectanebo merced a un enredo entre erótico y sobrenatural, que corre inefables aventuras siguiendo el esquema histórico ya conocido -sí, con sus batallas y sus campañas- pero trufado de aventuras fantasiosas y con una composición y estructura que recuerda a una especie de "evangelio" alejandrino -de hecho, será el libro más veces traducido tras la Biblia-, con su héroe, su traidor, sus hechos, sus dichos y su muerte.

La segunda Vida que se presenta en esta cuidada edición es un epígono aún más fantasioso que el Pseudo-Calístenes y que, curiosamente, tras una larga tradición oral, es la primera novela impresa en griego moderno (Venecia, 1750). Es una variante popular de aquellas recensiones tardoantiguas, acrecida con aventuras extravagantes, en lo que el profesor García Gual llama el "folletín" de Alejandro, que "acentúa el tono dramático y fantástico del relato original, reelaborado en una prosa sencilla, pintoresca, y de fuerte colorido popular". Es curioso este libro en prosa, que en la recepción neogriega convive con una versión versificada, llamada la Rimada, que data de algo más de un siglo atrás: ambas eran leídas y transmitidas en círculos domésticos en una época de baja alfabetización. Su exotismo es interesante en el plano geográfico, pues se citan pueblos turcomanos, se habla de Morea, nombre medieval del Peloponeso, se inventan reinos enteros, y aparecen personajes de la tradición bíblica y episodios exagerados. Pero no es solo literatura, pues estas leyendas han pervivido hasta hoy día en el folclor; si en el mundo eslavo y oriental se perfila a Alejandro como el guardián de las puertas que encierran la maldad de Gog y Magog, en el norte de Grecia y las islas se han extendido la fábula de la nereida o gorgona, hermana o viuda del rey, que se aparece entre las aguas del mar preguntando a los marineros si "vive el rey Alejandro": hay que responder que sí, que "vive y reina", o hundirá el barco sin remisión. Larga es, pues la sombre del mito de Alejandro.



Vidas de Alejandro

Dos relatos fabulosos

Pseudo Calístenes/Anonimo

Edición de Carlos García Gual

Traducción de Carlos García Gual y Carlos R. Méndez

Siruela, 2024

412 páginas, 26 euros

The Art of Deathloop (III)